Al menos 28 médicos han muerto en las últimas 24 horas en el Líbano debido a los bombardeos de Israel, informó este jueves en una rueda de prensa el director general de la Organización Mundial de Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus.
El jefe del organismo internacional advirtió que la asistencia de médicos en el país árabe sigue estando bajo amenaza, mientras que el sistema de salud se está deteriorando. «En las últimas 24 horas solamente en el Líbano han sido asesinados 28 médicos. Muchos trabajadores de la salud no se presentan a trabajar porque han huido de zonas donde trabajaban debido a los bombardeos», dijo Ghebreyesus, añadiendo que esta situación dificulta mucho el suministro de ayuda necesaria y la continuidad de los servicios sanitarios.
«La OMS pide una desescalada del conflicto para que se proteja y no se ataque la asistencia sanitaria, se aseguren las rutas de acceso y se entreguen los suministros, y se logre un alto el fuego, una solución política (del conflicto) y la paz», instó.
Asimismo, Ghebreyesus indicó que este viernes el organismo internacional pretendía entregar al Líbano un gran cargamento de ayuda médica, pero que por el cierre casi total del aeropuerto de Beirut no fue posible hacerlo. «La OMS pide a todos sus socios que faciliten los vuelos para entregar al Líbano los suministros vitales tan necesarios», insistió.
Situación afecta a los médicos
De acuerdo con los datos de la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA, por sus siglas en inglés), desde octubre de 2023 al menos 73 médicos han sido asesinados en el Líbano mientras desempeñaban sus funciones. A fecha del 29 de septiembre de 2024, según las autoridades libanesas citadas por la OCHA, más de un millón de personas se han visto obligadas a desplazarse, mientras que más de 1.000 personas murieron en el país árabe entre el 16 y el 27 de septiembre debido a los bombardeos masivos israelíes.
Desde el 8 de octubre de 2023, un total aproximado de 1.600 libaneses han muerto, incluidos 104 niños, mientras que más de 9.000 personas resultaron heridas, reportó la OCHA.
