Julián Alvarado | LA PRENSA DE LARA.- Las intensas precipitaciones que azotaron a todo el territorio larense la pasada semana, levantaron polémica con respecto al sistema de drenajes actual que tienen ciudades como Barquisimeto y Cabudare. Las preocupaciones de los habitantes de zonas de riesgo de inundaciones persisten, porque estas zonas han estado duramente comprometidas con las lluvias.
Esta realidad, sumada a los problemas que presentan ciudadanos de diversos sectores de la ciudad crepuscular, sobre todo en materia de servicios básicos como electricidad y agua, consideran especialistas en el ámbito político que deberían ser prioridad para los entes gubernamentales del estado y de los municipios.
«La mayoría de las personas son conscientes de la terrible situación que se vive. Un gran porcentaje de los ciudadanos actualmente no perciben los ingresos necesarios en sus respectivos trabajos para mantener una vida digna y aunado a eso, existen grandes falencias en materia del agua o servicios de luz», indicó Mario Perdigón, politólogo venezolano, que cree que los gobiernos y alcaldías deben ponerse manos a la obra en priorizar los trabajos a realizar en ciudades y municipios.
Perdigón añ;ade que no está en contra de la celebración de la navidad, pero con respecto a la invitación del gobierno nacional de empezar desde octubre a respirar el espíritu decembrino y decorar la ciudad barquisimetana desde esta fecha, considera que «aparte de embellecer la ciudad, deben reunirse y darle prioridad a la mejora de los servicios públicos».
Para el politólogo, el colapso de los drenajes de agua de lluvia y la falta del suministro de agua potable que sufren varias comunidades, hoy son prioridad.
Piero Trepiccione, como politólogo investiga la realidad social y política. Indicó que las fallas eléctricas, la escasez de agua, el aumento de la delincuencia, la gran cantidad de huecos en las calles y el deplorable estado del sistema de drenaje en el estado, no se solucionaran por si solos.
Ante el problema, Trepiccione enfatiza que la celebración de navidad no debe ser forzada. «No critico la celebración de una época tan alegre y bonita. Pero todo tiene su momento. Hay temas más importantes actualmente», especificó el politólogo.
