El Guaro Mirón.- Hasta para tragarse el bocaíto de comida hay que sudar bien la gota gorda porque los precios de todo lo que implique bebidas ha ido subiendo como la espuma.
Frutas, jugos de cartón, pulpas, sobrecitos y ni se diga los refrescos dejan a cualquiera con el bolsillo pelado.
En estos días que fui a hacer el mercadito me llevé la sorpresota al ver todos los precios de las frutas que aumentaron el doble y hasta más.
Las parchitas, guayabas, lechosa y guanábana que antes compraba a 150 bolívares el kilo, en la actualidad de consigue desde Bs. 300 en adelante.
El dicho de que: “si del cielo te caen limones, aprende a ser limonada”, pasó al olvido porque ahora ni eso se puede hacer.
Desde 400 y hasta mil bolívares dependiendo del tamaño es lo que puede costar un kilo de limón.
Las amas de casa cuando me vieron no se aguantaron y comenzaron a contarme que se han vuelto unas magas de tanta magia que hacen al ingeníarsela para variar los jugos de la semana.
Antes resolvían con la tradicional panela con limón pero ahora ni lo uno ni lo otro. Los limones están bien caros y la panela no se consigue.
Eduardo Molina, encargo de una de las fruterías ubicada al oeste de Barquisimeto, me contó que a pesar de los incrementos en los precios, no han bajado las ventas, la gente prefiere seguir comprando las frutas que la pulpa que aunque cuesta lo mismo rinde menos y el refresco es más dañino.
El tema de la escasez de azúcar es otra preocupación para los larenses ya que de no conseguirla les toca pasar el trago amargo o tomar agua.
Gloria Oropeza admite que compra frutas sólo cuando tiene azúcar a la mano, de lo contrario le toca tomar aguita o buscar jugos de cartón y rendirlos para la semana completa.