Los incendios forestales en Ecuador han arrasado más de 38.000 hectáreas de cobertura vegetal hasta el momento, mientras que en Quito, la capital, persisten focos de un gran incendio que se desató el pasado martes, devastando alrededor de 146 hectáreas en la zona centro-norte de la ciudad.
Según datos de la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos (SNGR), se han reportado más de 3.360 incendios forestales desde el pasado 1 de enero en diversas zonas, pero las provincias más afectadas son Loja, Azuay, Carchi, Cotopaxi, Imbabura y Pichincha, cuya capital es Quito.
Un total de 17 personas han resultado heridas, 227 damnificadas y 810 afectadas directamente, según las estadísticas de la SNGR, que dan cuenta de 4.236 animales afectados y cerca de 45.000 muertos.
Este jueves se mantenían trece incendios activos en Imbabura, Cotopaxi, Azuay, Loja, Chimborazo y Pichincha.
El cuerpo de bomberos de Quito se mantiene en la zona de Guápulo, el parque Metropolitano y el cerro Auqui, desde donde al mediodía de este jueves se apreció una gran columna de humo, que vuelve a afectar el aire de la ciudad, donde hay un constante olor a quemado.
Más temprano, el alcalde de Quito, Pabel Muñoz, había aseverado que sólo habían quedado dos focos del incendio, que comben vía terrestre y aérea.
Por ello consideró que debían comenzar a restablecerse las actividades de la ciudad, donde se cerraron vías en las zonas cercanas al incendio y se dispuso el teletrabajo para el sector público y educación a distancia en los centros educativos.
La ministra de Ambiente, Agua y Transición Ecológica, Inés Manzano, se desplazó este jueves a la provincia de Cotopaxi, donde los bomberos intentan controlar varios incendios, entre ellos uno que comenzó hace 27 días y que ha afectado a un parque nacional.
Los incendios se han multiplicado en Ecuador desde agosto debido a la grave sequía que atraviesa el país, lo que le ha llevado a realizar fuertes cortes programados de electricidad y agua.
Los cortes programados y en diferentes franjas horarias llegan hasta once horas diarias, pero en los últimos días el Distrito Metropolitano de Quito (DMQ) ha quedado fuera de la medida debido al incendio.
Investigan sobre causas de incendios en Ecuador
El Municipio de Quito declaró el miércoles a la capital ecuatoriana en situación de emergencia por los incendios forestales, que amenazan con reactivarse por efecto de los vientos y la sequía.
De acuerdo al alcalde, el martes se registraron 27 quemas en sectores periféricos del noreste de la ciudad como la zona de Guápulo, González Suárez, Bolaños, Bellavista, el cerro Auqui y zonas de la vía de los Conquistadores, siento la del centroeste de Quito la más grande.
Las autoridades insisten en que el fuego de Quito fue provocado y la Fiscalía despliega indagaciones para determinar el origen y posibles responsables del mismo.
Luis Tonato, un agente civil de tránsito, informó que la tarde del martes halló dos bidones con material inflamable cerca de la zona donde se presume que comenzó el incendio. Los bidones, que ahora están bajo custodia policial, contenían aceite usado y tenían un «fuerte olor a diesel», según Tonato.
Ciudadanos que se encuentran en la zona del incendio han denunciado el hallazgo de botellas con mecha, lo que se conoce popularmente como «bombas molotov» al contener combustible.
Una persona, que portaba un galón de combustible, ha sido aprehendida como sospechosa de haber causado el incendio forestal de Quito, pero sus familiares señalaron que estaba en la zona ayudando a apagar el incendio y que el combustible lo llevaba para usarlo en sus equipos de jardinería.
Los bomberos, con el apoyo de policías y militares, continúan en el combate a los incendios bajo días de intenso sol, calor y alta radiación. Sin embargo, Manzano comentó que las previsiones meteorológicas advierten de lluvias en el callejón interandino desde hoy hasta el 1 de octubre.