A nivel mundial, la búsqueda de igualdad entre ambos sexos ha tenido un camino largo y complicado para las mujeres. Si bien podemos decir que se han alcanzado metas importantes, en pleno siglo XXI, existen obstáculos legales y sociales que se deben superar, como el derecho a los mismos sueldos, a la educación, a ejercer representación política o decidir por si misma su destino.& ;
Los derechos que hoy las mujeres podemos disfrutar, se ganaron gracias a la lucha, constancia, sacrificio y valentía de muchas mujeres que dieron hasta sus vidas para conseguirlo.& ;
Recientemente, observamos los sucesos en Afganistán, donde un grupo de musulmanes conocidos como talibanes, tienen el objetivo de imponer su propia interpretación de la ley islámica, que impide, entre otras cosas, las libertades fundamentales de las mujeres, como salir sin un hombre cuidador, estudiar o trabajar, con consecuencias que van desde brutales castigos físicos hasta la muerte. Luego de 20 años de avances en este ámbito durante la ocupación de tropas Aliadas (USA, España, Francia, Alemania, etc.), las mujeres y niñas están viviendo el infierno de quedar atrapadas en un estado que las considera lo más bajo de la sociedad, pisoteando su dignidad y derechos humanos.& ; & ; & ; & ;
Indira Gandhi, Primera Ministra de la India a inicio de los 80, dijo: «Para liberarse, la mujer debe sentirse libre, no para rivalizar con los hombres, sino libres en sus capacidades y personalidad».
En Venezuela no fue diferente. Durante el período colonial, las mujeres se debían subordinar a los hombres, limitando su potencial solo al ámbito del hogar y/o su matrimonio. Desde entonces las mujeres han enfrentado obstáculos legales, políticos y sociales, para conseguir el nivel en el que actualmente nos encontramos.& ;
Revisando brevemente la historia, la lucha por el voto de la mujer a nivel internacional se extendió hasta américa latina y el caribe, tocando a Venezuela. Entre los años 1933 y 1944, las mujeres organizadas fijaron su objetivo en la igualdad de derechos, entre ellos, la «democratización de la democracia». Recordemos que las leyes eran redactadas por los hombres de esa época y escasamente las mujeres eran tomadas en cuenta. Por ejemplo, en el código de comercio estaba establecido que las mujeres solo podían ejercer el comercio con permiso expreso de su esposo.& ;
Las reformas al código civil, abrieron el camino para que las mujeres tuvieran personalidad jurídica, es decir, ser reconocida su existencia civil, y en las elecciones de 1947, consiguieron ejercer su derecho al voto universal y secreto.
En la actualidad, en la crisis sociopolítica y económica existente, las mujeres no podemos dejar pasar oportunidades que nos permitan conseguir pequeños objetivos que, al sumarlos, muestran cambios significativos.& ;
Debemos dejar a un lado la victimización que obstaculiza el avance personal, recuperarse de las situaciones vividas y recobrar el sentido de superación. Necesitamos ser mujeres con decisión y acción; copartícipes de la conservación de los espacios ganados, generando nuevos y preparando el camino para nuestra descendencia, dejando una mejor Venezuela que la tuvimos al nacer.& ;
Cada día podemos ser forjadoras de cambio.
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