Euseglimar González | LA PRENSA DE LARA.- Las calles del sector La Esperanza de Pavia estaban solas, cada quien estaba metido en su casa, algunos veían televisión y otros hacían sus quehaceres, habían pasado seis meses desde que se declaró cuarentena por la covid-19, pero una desgracia tocó la puerta a una familia. Dos niñ;os murieron y otra resultó herida luego de que una granada detonara en el patio de una de las viviendas.
Ese 9 de septiembre, hace dos añ;os, fue de tragedia. El padre de los niñ;os estaba pintando la pared de la casa, mientras que los pequeñ;os de 10, 8 y seis añ;os de edad estaban jugando fútbol en la calle.
Eran casi las 2:00 de la tarde, cuando el papá les dijo a los tres niñ;os que se metieran a la casa porque había llegado el camión cisterna para surtir de agua a la comunidad. Ellos hicieron caso y llegaron hasta el porche de la vivienda y comenzaron a pintar un dibujo que el papá había hecho.
El hombre continuó pintando un cuarto, pues su hijo mayor estaría próximo a cumplir los 11 añ;os. Los menores continuaron en el patio de la vivienda, poco tiempo después se habrían conseguido una «pelota» cerca de una quebrada y les llamó la atención.
Era una «pelota» con pepas negras, comenzaron a observarla, eran tan sólo unos niñ;os con curiosidad, uno de los pequeñ;os decidió agarrarla y comenzó a manipularla, al parecer, iba a jugar con ella y sin darse cuenta la activó y causó la detonación.
El sonido fue tan fuerte que alertó a toda la comunidad, quienes pensaban que se trataba de una bombona de gas. Los papás de los niñ;os quedaron aturdidos dentro de la casa, cuando lograron pararse de inmediato salieron hacia el porche.
Un poco aturdidos llegaron hasta el frente de la vivienda y se encontraron con la escena más desgarradora. El cuerpo del menor de 10 añ;os estaba tendido en el piso ensangrentado; mientras que el del otro niñ;o de 8 añ;os estaba a metros de él, lleno de sangre, y la pequeñ;a de 6 añ;os herida y gritaba desesperadamente.
Los vecinos también llegaron hasta la casa y vieron la desgarradora escena. En medio de la desesperación, los padres de los pequeñ;os gritaban con todas sus fuerzas que los ayudaran.
Ayuda tarda
Los vecinos junto a los padres de los pequeñ;os comenzaron a pedir ayuda a las personas que tenían carro en la comunidad, pero debido a las fallas en la distribución de combustible
